Cuanta razón tenía Baudelaire cuando dijo "me parece que seré feliz allí donde no estoy".
Hace casi dos siglos este gran poeta francés, bohemio y navegante, en sus pensamientos y reflexiones coincidió plenamente con los mismos pensamientos de casi todos nosotros, no como pensamiento constante, pero si como algo habitual. Buscamos y deseamos lo que no tenemos, en demasiadas ocasiones sentimos que donde estamos no es el lugar adecuado.
Y esto, como todo, tiene su lado bueno y su lado malo. Algo positivo es saber que eres consciente de poder mejorar y la parte negativa de esto es que no eres feliz con lo que tienes o donde estás en ese momento. Otra cosa positiva, es que tienes la esperanza de llegar ser feliz y lo negativo de esto es pensar que necesitas tener una esperanza para ser feliz. De cualquier manera, parece necesario que hay que ser consciente y tener esperanza. En otras palabras, hay que sentir, pensar, querer y actuar con conocimiento para ser consciente y además tu estado de ánimo a de ver posible lo que deseas.
Por lo tanto las llave de la felicidad, y esto es mucho decir pero podríamos acercamos, consiste en pensar positivamente lo que deseamos y queremos, para que mediante el conocimiento, podamos actuar y así alcanzar la felicidad.
Felicidad: primero desear algo, segundo adquirir el conocimiento necesario para conseguir lo que deseas y tercero actuar en base a ese conocimiento adquirido para alcanzar tu deseo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario