"La literatura es la libertad", Susan Sontag.

lunes, 7 de octubre de 2013

"Niebla", de Miguel de Unamuno.


Niebla (1914) no es una novela, es una "nivola", tal como decía su autor Miquel de Unamunor, sin lugar a dudas una de las obras de ficción más importantes de Unamuno. El libro aborda la inseguridad del hombre preocupado por su destino y su mortalidad, un tema unamuniano por antonomasia.

El título está cargado de significado, dado que el libro difumina la línea entre la ficción y la realidad. También son nebulosas las descripciones físicas de los personajes y lugares, y hasta pone en duda la naturaleza de la existencia humana, el ser o no ser. Incluso se pregunta ¿quién es más real, el Quijote o Miguel de Cervantes?

El protagonista es Augusto Pérez, un joven rico y profesional. Es hijo único y cuando su madre viuda fallece, Augusto no sabe qué hacer con su vida. Por casualidad conoce a una pianista, Eugenia Domingo del Arco, y comienza a cortejarla, pero Eugenia lo rechaza porque ya tiene novio. Augusto entabla una amistad con Rosario, una de las sirvientas de Eugenia, y comienza a cuestionar el sexo femenino y se pregunta si las mujeres tienen alma y si se puede confiar en ellas. Como experimento, Augusto le pide a Eugenia que se case con él para ver cómo respondería. Eugenia, quien en ese momento se había peleado con su novio Mauricio, decide aceptar su propuesta de matrimonio. Sin embargo, poco antes de la boda Augusto recibe una carta de Eugenia en que ella le dice que ha decidido no casarse con él y que se va a ir a las provincias con Mauricio a vivir de un trabajo que Augusto le había conseguido. Tras recibir esta noticia, Augusto contempla el suicidio. Pero antes, decide ir a Salamanca a ver a Don Miguel de Unamuno. En su visita, el escritor le dice a Augusto que no existe, que sólo es un personaje de ficción en su libro y que está destinado a morirse, no a suicidarse. Augusto discute con Don Miguel —quien juega el papel de Dios en la vida del personaje como autor del libro— y le suplica que no lo mate. Augusto vuelve a su casa muy confundido y allí se muere al lado de su perro Orfeo. No se sabe si Augusto se mató o si Don Miguel lo mató. Víctor dice en el prólogo que Augusto se suicidó. Unamuno dice en el post-prólogo que él decretó la muerte de Augusto.

Los deferentes temas tratados en la novela como la inmortalidad, el ansia de inmortalidad del ser humano es un tema recurrente en la obra unamuniana. En Niebla, Augusto lucha contra su destino, rogándole al autor que no lo mate.

La incapacidad del ser humano, Augusto es incapaz de resolver dilemas cotidianos, como si debe llevar el paraguas. Tampoco puede hacer decisiones importantes, como si debe casarse, o resolver los dilemas existenciales, como si existe o no. Augusto está tan perdido en sus pensamientos, que no está presente en la vida, como si no existiera. Por ejemplo, no ve a Eugenia cuando la pasa en la calle por estar tan distraído en sus pensamientos. El tema resalta aún más en la conversación con Don Miguel al final de la obra, cuando éste le dice a Augusto que no existe. Otro tema recurrente es la igualdad de la mujer, Augusto cuestiona la igualdad de la mujer. No está seguro si la mujer tiene alma y si puede ser fiel a su palabra; quiere explorar estas dudas.

En el tratamiento de la metaficción, Víctor y Augusto hablan de la novela o "nivola" que Víctor está escribiendo. Unamuno, a través del personaje de Víctor, explica su teoría de la literatura y lo que es una "nivola". Como sugiere el título Niebla, esta obra borra la línea entre la realidad y la ficción. Unamuno se mete dentro de la ficción y el protagonista descubre que es sólo un ente de ficción.
En el estilo de la novela predominan los monólogos y diálogos, y la escasa narración es omnisciente. Hay muy poca descripción, hasta el punto en que no se sabe dónde ni cuándo ocurre la historia, ni mucho de la apariencia de los personajes. Esta falta de descripción no sólo caracteriza la ficción unamuniana, sino casi toda la narrativa de los modernistas, marcando una ruptura con el realismo y sus descripciones detalladas, presentaciones panorámicas y párrafos largos. Otra diferencia entre Niebla y la novela tradicional es que el lector tiene un papel activo y tiene que interpretar el final abierto y decidir cómo se murió Augusto.

La obra está estructurada en 33 capítulos, un prólogo, un post-prólogo y un epílogo. También incluye cinco historias intercaladas. La confluencia de la realidad y la ficción reaparece en la autoría de algunas partes de la obra. Víctor Goti, un personaje y amigo de Augusto, es autor del prólogo. El post-prólogo fue escrito por Unamuno y el epílogo por el perro Orfeo.

martes, 17 de septiembre de 2013

"Sefarad", de Antonio Muñoz Molina.


Esta extraordinaria novela de novelas nos ofrece un tejido de historias entrelazadas magistralmente con una compleja estructura que la hace complicada de leer pero al terminar es difícil de olvidar. Novela que combina la reflexión histórica, lo biográfico y la ficción, elementos habituales de Muñoz Molina, se trasforman en lo que parece una historia personal y hace que la novela tenga un sentido unitario. Diferentes historias que van saltando de una a otra hasta transformarse en una sola mediante una telaraña de instantes.

Sefarad, la patria perdida y nunca olvidada por los judíos expulsados de la España de los Reyes Católicos, de los innumerables ejemplos de hombres y mujeres exiliados. La novela explora los mecanismos psicológicos de todos esos personajes expulsados de sus raíces, de judíos masacrados por la locura irracional, de personajes quiméricos o no tanto que descubren el odio y el amor en el lugar más insospechado. Meticulosa y apasionada mezcla de personajes reales como Kafka, Primo Levi, Willi Münzenberg con personajes ficticios, tragedias llevadas al extremo y pasiones nunca correspondidas.

El magistral discurso de esta novela, la complicada alternancia de las tres personas narrativas, su prosa característica, envolvente y densa, la fuerza del recuerdo añorado, mezclado con el presente de la vida vivida y de otras vidas, forman la base de estas historias, algo que no está al alcance de cualquiera. La capacidad del autor para expandir su amplísimo universo de manera muy certera y sincera, añadido a la esencia emocional y latente de sus narraciones engloba a Muñoz Molina dentro de esos pocos novelista exclusivos de la literatura contemporánea.



lunes, 16 de septiembre de 2013

BAUDELAIRE


Cuanta razón tenía Baudelaire cuando dijo "me parece que seré feliz allí donde no estoy".

Hace casi dos siglos este gran poeta francés, bohemio y navegante, en sus pensamientos y reflexiones coincidió plenamente con los mismos pensamientos de casi todos nosotros, no como pensamiento constante, pero si como algo habitual. Buscamos y deseamos lo que no tenemos, en demasiadas ocasiones sentimos que donde estamos no es el lugar adecuado. 

Y esto, como todo, tiene su lado bueno y su lado malo. Algo positivo es saber que eres consciente de poder mejorar y la parte negativa de esto es que no eres feliz con lo que tienes o donde estás en ese momento. Otra cosa positiva, es que tienes la esperanza de llegar ser feliz y lo negativo de esto es pensar que necesitas tener una esperanza para ser feliz. De cualquier manera, parece necesario que hay que ser consciente y tener esperanza. En otras palabras, hay que sentir, pensar, querer y actuar con conocimiento para ser consciente y además tu estado de ánimo a de ver posible lo que deseas. 

Por lo tanto las llave de la felicidad, y esto es mucho decir pero podríamos acercamos, consiste en pensar positivamente lo que deseamos y queremos, para que mediante el conocimiento, podamos actuar y así alcanzar la felicidad.

Felicidad: primero desear algo, segundo adquirir el conocimiento necesario para conseguir lo que deseas y tercero actuar en base a ese conocimiento adquirido para alcanzar tu deseo.